“Terremoto, terrorismo, barbarie y utopia: El Salvador, Nueva York, Afganistán” de Jon Sobrino

“Terremoto, terrorismo, barbarie y utopia: El Salvador, Nueva York, Afganistán” de Jon Sobrino

La intención inicial de este libro fue escribir algunas reflexiones sobre los terremotos ocurridos en El Salvador, el 13 de enero y el 13 de febrero de 2001. No obstante, se interrumpió por los atentados terroristas contra las torres gemelas y los bombardeos a Afganistán Los atentados le restaron actualidad al terremoto de El Salvador, aunque, de hecho, el olvido ya había tenido lugar debido al tiempo transcurrido y a la amnesia inherente a la civilización occidental en que vivimos, cuando se trata de las tragedias de los pobres del Tercer Mundo.

El hecho ocurrió en Estados Unidos fue insólito, pero no ha sido ni el más masivo ni el más cruel. Y aunque comparar terrorismos y barbaries tiene algo de macabro, el terrorismo en Nueva York y Washington no es lo que ha producido mayor numero de victimas inocentes. O recordemos, recientemente, los 100.000 muertos en la guerra de Irák, y los más de 4000 muertos civiles en Afganistán, que superó la cifra de muertos en Estados Unidos, por citar algunos ejemplos. 

Esta vez, el terrorismo no se ensaño con los pueblos del Tercer Mundo, sino con una democracia occidental a la que obligadamente dirigen su mirada las demás naciones. Ocurrió en su propio suelo, sorteando todas las medidas de seguridad, con el ridículo y la humillación que ello lleva consigo para una potencia no acostumbrada a sufrir este tipo de reveses. De ahí que sus responsables se conviertan por definición en “el mal mayor” y de ahí también la obligación de luchar contra el. Así las cosas, se ha forzado a gobiernos y países a hacer una especie de juramento anti-terrorismo”, aunque no se ve ni de lejos que se invite a, no ya que se imponga, un “juramento anti-pobreza, anti-injusticia, anti-encubrimiento, anti-desprecio a los pobres”. La realidad ha quedado reducida al “11 de septiembre”, pues es lo que afecta a Occidente, pero el 7 de octubre es una fecha que no dice nada porque Afganistán en sí misma no afecta, sigue sin existir.